La Consellería de Sanidad advierte que la proliferación de bacterias y virus puede aumentar infecciones gastrointestinales, de piel y respiratorias, especialmente en viviendas inundadas debido a la humedad y esporas de moho.
Por: Margareth Chirinos y Camila Novoa
Las inundaciones provocadas por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) han dejado a Valencia en una situación crítica, con 217 fallecidos y decenas de desaparecidos, según informó el Ministro de Transporte, Óscar Puente. La estación meteorológica de Turís registró un récord de 179.4 mm de lluvia en una hora. Por ello, la Conselleria de Sanidad de la región, advierte de la complicada situación de los residentes, quienes enfrentan riesgos elevados en enfermedades gastrointestinales y respiratorias, debido al agua estancada y contaminada en la zona.
En Valencia, la salud pública enfrenta serias preocupaciones por la contaminación del agua y se ha catalogado como una emergencia sanitaria. Howard Petit, médico radiólogo y residente en la ciudad, advierte que “ya no hay fuente directa y el agua proviene de fuentes externas y no tratadas”. Por lo que presenta las problemáticas que esto traería para la comunidad local, a patógenos, residuos orgánicos e incluso restos de cadáveres arrastrados por las inundaciones, aumentando el riesgo de enfermedades como leptospirosis y hepatitis A.
Además, las condiciones favorables para vectores como los mosquitos facilitan la propagación de enfermedades adicionales, como el dengue y el chikungunya, según informa la Gaceta Médica de España. Petit, quien también es voluntario en la zona, enfatiza en la urgente necesidad de implementar medidas de cloración y supervisión sanitaria para prevenir brotes de infecciones. “Esta situación exige una coordinación efectiva entre las autoridades y la comunidad para garantizar la salud de todos los afectados”, destacó.
Tipos de enfermedades:
Hasta el 1 de noviembre, se han reportado más de 205 muertes y un aumento en enfermedades respiratorias como gripe y neumonía, que se transmiten por gotas y superficies contaminadas. La doctora Marisa Torres, directora del magíster en Epidemiología de la Universidad Católica de Chile, señala que esta crisis ha impactado “todos los aspectos de la salud: físico, psicosocial y espiritual”, y que la concentración en refugios agrava la propagación de infecciones, requiriendo intervención urgente.
Sobre los riesgos de enfermedades e infecciones, la epidemióloga destacó las áreas afectadas por este desastre natural:
Se ha registrado un aumento de infecciones cutáneas como dermatitis y celulitis, vinculadas al contacto con agua contaminada, según la Consellería de Sanidad. Agregado a esto, instituciones de salud españolas advierten que “la prevención es clave” y se recomienda mantener la piel limpia y seca, ya que estas afecciones pueden complicarse sin un manejo adecuado.
En cuanto a las enfermedades infecciosas, sostuvo que“ hay un amplio despliegue de enfermedades. Unas relacionadas a las infecciones entéricas, es decir, intestinales que se asocian a la contaminación del agua que se está consumiendo o utilizando, pueden producirse infecciones gastrointestinales que llevan a su vez a la producción de cuadros clínicos como las gastroenteritis o las gastritis o las diarreas”.
Marisa también destaca la vulnerabilidad de grupos de alto riesgo, como adultos mayores y niños pequeños, en esta crisis. “En los adultos mayores, la deshidratación es crítica, pues muchos no se dan cuenta hasta que es demasiado tarde”, advierte. Además, subraya la falta de medicamentos para quienes padecen enfermedades crónicas y la interrupción de electricidad, que afecta a personas dependientes de equipos médicos. “La falta de acceso a fármacos y la interrupción en la electrodependencia pueden tener graves consecuencias para los más vulnerables”, añade con preocupación.
Prevención:
Respecto al control y la aplicación de medidas preventivas la académica comentaba, que es fundamental implementar un sistema de vacunación para evitar la hepatitis o el tétano. También, otras de las medidas fundamentales que menciona la Epidemiologa Torres es asegurar el uso de agua potable, ya sea con camiones aljibes o agua potable embotellada.