La psicóloga Constanza Orellana advirtió sobre los riesgos de que los jóvenes estén expuestos a una sobrecarga de publicidad de estas plataformas de apuestas.
El pasado martes 30 de agosto, la Corte Suprema ordenó a las empresas de internet bloquear el acceso a las casas de apuestas online en Chile que no están autorizadas, debido a que no tienen una ley reguladora. Por otro lado, se argumenta esta iniciativa debido a los riesgos a los que se exponen los usuarios de las plataformas, ya que, se vuelven vulnerables a desarrollar ludopatía.
En la actualidad, se ve con mayor naturalidad en las personas la constante presencia de los sitios web de apuestas, los que no constan de una regularización correspondiente a diferencia de otras casas de apuestas tradicionales, como por ejemplo “Polla Chilena de Beneficencia”.
Esto puede poner en riesgo a las personas ya que la ludopatía se caracteriza por la “dificultad de una persona para controlar sus ganas de jugar o apostar”, subraya Constanza y tener consecuencias graves.
Los riesgos de la ludopatía y la exposición de los casinos online
Orellana explicó en qué momento el juego recreativo se vuelve un riesgo para el usuario y señaló que:
Por otro lado, advirtió sobre el peligro que representa que jóvenes estén expuestos de manera tan constante a este tipo de plataformas.
“Hay muchos influencers que promocionan estos casinos y cosas, y les hacen creer que si no tienen plata, esa es la manera de obtener y lo señalan como algo bueno y no. No saben lo riesgoso que puede ser para una persona”.
Finalmente, la psicóloga comentó que hay que estar alerta a las señales de una persona que realiza este tipo de actividades, ya que pueden pasar muy desapercibidas en el día a día.
“La mayoría de los casos que he visto, las familias se dan cuenta porque siempre necesitan dinero, porque lo pierden. Además, otras veces evitan que la gente les pregunten sobre el tema, porque creen que no podrán pasar desapercibidos”.
¿Qué dice la Superintendencia de Casinos de Juego respecto a la medida de la Suprema?
Pese a que la Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ) es la encargada de regular la industria de casinos, señalaron que:
“Mientras no se apruebe el proyecto de ley que actualmente se está tramitando en el senado, no posee facultades de regulación ni fiscalización sobre las plataformas de juegos de azar en línea”.
En Chile, los lugares de apuestas con autorización legal para funcionar son: la Lotería de Concepción, Polla Chilena de Beneficencia, Teletrak e Hipódromo y Casinos de Juegos autorizados. Cada uno de ellos opera bajo marcos normativos específicos que regulan su funcionamiento.
Por otro lado, las casas de apuestas han señalado en distintas ocasiones que, al no tener una normativa actualizada que las regule, ya que la vigente es obsoleta y no los incluye, su funcionamiento no sería ilegal”. Respecto a esto, la SCJ añadió que:
“Para desarrollar juegos de azar en línea debe haber una ley que los autorice, y mientras ello no ocurra, es una actividad totalmente ilegal. No existe ningún operador autorizado en el país para desarrollar comercialmente esta actividad. Es decir, independientemente de su origen, todas son ilegales”.
Antecedentes previos
Desde la aparición de estos sitios web en 2018, fueron declaradas por la Superintendencia de Casinos de Juego como ilegales, sin embargo, fue recién el 1 de febrero de 2022 cuando se presentó por primera vez el proyecto de ley que busca regularizar las plataformas de apuestas online, en aspectos como el pago de impuestos, medidas de juego responsable y publicidad.
Posteriormente, el 2023 la Corte Suprema ordenó a la empresa de Internet “Mundo Pacífico” a bloquear 23 sitios de apuestas considerados ilegales, pese a eso, los sitios cambiaron sus URL y continuaron su funcionamiento con normalidad, solamente se obligó a la Asociación Nacional de Fútbol Chileno a terminar el contrato de auspicio del campeonato.
Además, el 4 de abril de este año se cerró finalmente una causa investigada desde el año 2022 en la que se indicó que “no se cumplieron los requisitos para imputar un delito penal contra estos sitios”.
Por Josefina Aguirre y María Paz Ramírez.